El concepto del ahorro deriva del árabe “hurr” que significa libre, librarse del gasto, proveniente a su vez de “horro” liberar al esclavo.
Para sentirnos “libres” y no estar “esclavizados” el ahorro bien entendido y la Planificación Financiera pueden ser dos herramientas muy útiles. El dinero ahorrado puede librarnos en situaciones de urgencia y/o imprevistos. También nos mantiene a salvo en el caso de no percibir emolumentos durante un cierto periodo de tiempo o nos permite adquirir bienes y/o servicios que excedan el gasto que se realice normalmente.
El concepto del ahorro no tenemos que entenderlo como el monto sobrante después de haber realizado todos los gastos del mes, es un gran error. El concepto del ahorro es bueno concebirlo como un monto que se reserva nada más percibir los ingresos mensuales, sea cual sea, en función de tus posibilidades pero de forma constante en el tiempo.
El tiempo también es un concepto importante cuando hablamos de ahorro. La Cultura Financiera nos enseña que el dinero es bueno tenerlo en movimiento para que no pierda valor y que cuanto más tiempo se tenga, mayor será la rentabilidad que aporte.
También otra recomendación es que el ahorro se divida en partes, no guardar todo en el mismo lugar, “no poner todos los huevos en la misma cesta” lo interesante es destinar a tres sitios distintos para ahorrar a corto, medio y largo plazo. Incluso es positivo pensar en un cuarto, no nos olvidemos de la solidaridad, ayudar a lo que quieras pero tenerlo en cuenta, ¡volverá con creces!.
